CALEFACCIÓN EN INVIERNO

Si no practicamos el camping de invierno en lugares propensos a la cumulación importante de nieve, los queños problemas de uso de la calefacción seguramente se limitarán a que se nos termine el gas a las cuatro de la madrugada, o a que se nos apague la calefacción por las rachas de viento que suelen prodigarse por las sonas de montaña.

Para no tener que levantarse por la noche para cambiar la botella vacía, lo mejor es instalar un equipo Duomatic de intercambio automático de las bombonas; cuando una está vacia, aunque su coste es un poco elevado, compensa porque evita esta incomodidad.

Mas incordio represente el que se nos apague constantemente la calefacción en un día o noche de fuerte viento racheado. En estos casos la solución es más simple y económica: bastará con acomplar a nuestro aparado un encendido automático electrónico, el cual vuelve a encender el quedamador de la calefacción automática cuando éste se apaga por cualquier cosa.

Después de un cambio de bombona de gas, es posible que el encendido de la calefacción sea un poco más costoso, debido al que la instalación se ha llenado de aire. Para vaciar el sistema se debe mantener pulsado el botón del mando de encendido un tiempo más prolongado del normal, sin accionar el piezo eléctrico o el encendido automático, para evitar que la acumulación de gas produzca una pequeña explosión.

La acumulación de nieve puede, también, taponar la chimenea de evacuación de gases e impedir el encendido del quemador, al no existir circulación de aire. la solución es tan sencilla como quitar la nieve acumulada alrededor de la chimenea.

Aunque a su llegada a la caravana encuente un ambiente muy frío y húmero, durante los primeros minutos de uso de la calefacción debe mantener la llama del quemador al mínimo: un calentamiento demasiado rápido del aire situado dentro del tubo de salida de gases provocaría un tapón térmico en su interior y ahogaría la llama, apagándola.

Si su caravana o autocaravana están equipadas con instalación de aire impulsado, gozará de una mayor confortabilidad. la función de estos sistemas no consiste en aportar más poder calorífico, sino en repartir más adecuadamente el calor dentro delhabitáculo, evitando zonas descompensadas de temperatura.

El principio básico de funcionamiento de la calefacción de una caravana o una autocaravana se pude comparar con el de un radiador común de una calefacción central doméstica: el agua caliente sería el cuerpo del radiador, y el quemador de gas, el cuerpo de la calefacción. En ambos casos, cuando más cerca nos encontremos, mayor temperatura notaremos.

INSTALACIÓN DE AIRE IMPULSADO

La instalación de aire impulsado es muy simple. Consiste en situar un motor de aspiración en la parte trasera de la calefacción, contectado a una red de tuberías con varias bocanas de salida que reparten el aire caliente por todo el habitáculo. El motor funciona con un variador de velocidad que permite obtener diversos caudales de aire.

Al poner en funcionamiento el aire impulsado debemos variar el mando de la calefacción para el termostato actúe con una temperatura más elevada de lo que sería la óptima sin el aire impulsado. si no se efectúea este pequeñe ajuste y dejamos que la calefacción trabaje con la misma temperatura que tenía sin el motor de aire impulsado en marcha, el aire saldrá sin calentar, ya que la misma circulación formazada del aire por el cuerpo de la calefacción reduce la intensidad de calor que irradia. A mayor velocodad del aire impulsado, será necesario un mayor nivel de temperatura.

CLARABOYAS DE VENTILACIÓN

Aunque las calefacciones instaladas habitualmente en las caravanas disponen de un buen sistema de seguridad, no se deben obstruir los orificios de ventilación permanente de las claraboyas. El mantener siempre una salida de aire en el techo, acompañada de las entradas permanentes que incorporan todas las caravanas en la puerta o en el suelo, mantiene una ventilación constante en el interior, librándolo de una posible atmósfera viciada o tóxica. Es convenitne retirar la nieve acumulada alrededor de las claraboyas, con el fin de evitar que su deshielo pueda producir pequeñas filtraciones de agua por los orificios de ventilación, hacia el interior del habitáculo. No hace falta quitar mucha, sólo evitar que ésta esté pegada al marco de la claraboya. La operación podrá efectuarse desde elinterior mismo de la caravana con la claraboya levantada.

En los días de fuerte viento, si desea mantener la claraboya abierta, es necesario orientarla de tal manera que ofrezca un plano inclinado hacia la dirección que recibe el viento. Si se mantiene totalmente abierta, existen muchas posiblidades de que nos quedemos sin ella.

ANCLAJES CONTRA EL VIENTO

Si la zona de acampada está ubicada en regiones de fuerte viento, es aconsejable asegurar las caravanas mediante unos anclajes en el suelo (tipo piqueta gigante) y unas cadenas que unan éstos con el chasis. No es aconsejable sujetar las cadenas en las patas de apoyo, ya que su resistencia es mucho menor que en el chasis.

CADENAS

Si bien no es aconsejable viajar con una caravana en medio de fuertes tormentas de nieve, recibimos aguna consultas de cómo se deben colocar las cadenas en la caravana.

Las cadenas (no es el caso de las autocaravanas) sólo se deben colocar en las ruedas motrices del automóvil, ya que, al no ser un vehículo tractor, las caravanas no precisan la incorporación de cadenas a sus ruedas. Éstas no tendrían ninguna utilidad y dificultarían un arrastre ya de por sí complicado en condiciones adversas.